Existe un conjunto de afecciones poco frecuentes llamadas Parkinsonismos, con síntomas similares a la Enfermedad de Parkinson (EP), los que, mediante la consulta clínica y estudios complementarios, el neurólogo puede diferenciar. Su tratamiento difiere de la genuina EP.
A continuación el Dr. Ricardo Maiola, Neurólogo del Programa de Parkinson, nos describe cuáles pueden ser las causas más significativas de este conjunto de afecciones:
- De origen Vascular (un ejemplo son los ACV que comprometen estructuras profundas del cerebro como los ganglios de la base).
- Metabólicas-hereditarias (como la enfermedad de Wilson que presenta trastornos en el transporte y depósito de cobre).
- Medicamentosas (los pacientes que reciben tranquilizantes mayores, llamados neurolépticos, o bien, los llamados vasodilatadores cerebrales).
- Tóxicos (como el manganeso).
- Traumáticos (ej.: algunos boxeadores que recibieron numerosos golpes).
- Trastornos degenerativos del sistema nervioso central (como la Atrofia multi- sistémica, en la que los pacientes tienen síntomas de la esfera autonómica – urinarios, respiratorios y digestivos;o bien, la Parálisis supranuclear progresiva, en la que los pacientes tienen limitación en los movimientos conjugados de los ojos, trastornos de la marcha y déficit cognitivo; y la Degeneración córtico-basal, en la que los pacientes tienen posturas anormales de un miembro superior, con déficit de sensibilidad en dicho miembro).
Los distintos tipos de Parkinsonismo no se tratan de la misma manera, pero el Neurólogo dispone del conocimiento y la experiencia de la atención clínica que le permite reconocer rasgos comunes como “una evolución diferente y pobre respuesta al tratamiento con levodopa y a los medicamentos utilizados en el tratamiento de la enfermedad de Parkinson. En relación a los síntomas motores, la pérdida del equilibrio y caídas son más frecuentes que en la genuina EP” sostiene el Dr. Maiola.
Asimismo, los neurólogos cuentan con pruebas de laboratorio y de diagnóstico por imágenes que contribuyen a diferenciar los Parkinsonismos del Parkinson. “Algunos son el estudio del metabolismo del cobre en sangre y orina, los estudios cardiovasculares autonómicos, para evaluar la repercusión del sistema nervioso autónomo o neurovegetativo, la resonancia magnética, que permite demostrar lesiones vasculares o de otro origen, son de suma utilidad en aquellos que presentan cuadro parkinsoniano atípico” afirma el Dr. Ricardo Maiola.
Con respecto al tratamiento “es diferente, aunque el uso de la levodopa se indica igualmente, pero con respuesta más pobre. Los pacientes con parkinsonismos requieren cuidados muldisciplinarios y kinésicos adecuados (que el kinesiólogo con experiencia aplicará en cada paciente)” declara el Neurólogo.
Frente a ciertos trastornos en la marcha (arrastrar los pies, pasos cortos, dificultad para despegar los pies del suelo al caminar, temblor en brazos o piernas, rigidez, lentitud en los movimientos e inestabilidad al caminar) es conveniente consultar con el neurólogo con experiencia en el tema, quien en “una consulta temprana y el seguimiento frecuente, dará con el diagnóstico y el tratamiento correcto” sostiene el Dr. Ricardo Maiola.